El 33 Festival Internacional de Jazz de Málaga reconocerá las trayectorias del saxofonista Charles Lloyd y el pianista Kenny Barron, dos leyendas de la época dorada del género, y se acercará a tres maneras distintas de afrontar la exploración de sus límites con la presencia de los trompetistas Charles Tolliver y Nils Petter Molvaer y del batería Antonio Sánchez. El saxofonista malagueño Ernesto Aurignac y la trompetista y vocalista catalana Andrea Motis redondean el cartel del encuentro jazzístico, que patrocina Naturgy y se celebrará en el Teatro Cervantes del 5 al 11 de noviembre, siete días en los que la música más libre se podrá escuchar en todos los rincones de la ciudad. De hecho, Málagajazz, el proyecto de ciudad promovido por MAHOS, AEHCOS y el Ayuntamiento, sumará a las decenas de actuaciones de su ‘Abierto’ las nuevas citas del programa municipal Festival de Jazz… en tu zona, con lo que los once distritos de Málaga contarán con su respectiva dosis de música improvisada.
El Premio ‘Cifu’, instaurado hace tres años por el Festival Internacional de Jazz de Málaga para homenajear al carismático comunicador radiofónico y televisivo y a la figura más señera de la edición, recaerá en esta ocasión en Charles Lloyd, un carismático saxofonista cuyo “acuoso” sonido fue en su día comparado con el del inmenso Coltrane. El segundo galardón, el concedido por Málagajazz desde el año pasado para reconocer “el talento musical, la maestría y la dedicación a su instrumento” de otra de las estrellas del Festival, le corresponderá a otro grande, Kenny Barron, un pianista que desarrolló en sus inicios una meteórica carrera como acompañante de James Moody, Dizzy Gillespie o Yusef Lateef y que desde 1968 graba como líder.
La concejala de Cultura de Málaga, Noelia Losada, y Juan Antonio Vigar, director-gerente del Teatro Cervantes, han presentado esta mañana en el Teatro Cervantes el cartel de esta 33 edición y sus claves: grandes figuras de una amplia paleta estilística, desde grandes músicos del postbop y el ‘avant-garde’ de los sesenta al más evanescente e hipnótico sonido europeo o al talento nuevo local y nacional, precios contenidos con interesantes descuentos progresivos y enriquecimiento de Málagajazz con su extensión a todos los distritos. Así, las entradas para ver los conciertos principales se pueden adquirir desde 9 euros; la localidad más cara, para escuchar al quinteto de Lloyd desde el patio de butacas o los palcos de platea y primero, cuesta solo 36 euros, y hay descuentos para compras de varias actuaciones: un 25 % si se adquieren tiques para 6 o los 7 conciertos principales, un 20 % si se compran para 5 y un 15 % si se retiran para 4 (excluidas las entradas de Paraíso). Las entradas estarán disponibles desde mañana martes 16 de julio. Los siete conciertos comenzarán a las 20.30 horas en el Teatro Cervantes.
En representación de Málagajazz compareció Jesús Sánchez, portavoz de la asociación de hosteleros MAHOS, que con AEHCOS y el apoyo del Ayuntamiento diseña este “festival ‘de verano’ en pleno final de otoño” que se ha convertido en una fiesta de indudable atractivo cultural y turístico en el noviembre costasoleño. A las decenas de actuaciones del Abierto de Málagajazz programadas por MAHOS y AEHCOS con el apoyo de Cervezas Alhambra y del Consistorio, un atractivo programa que se anunciará más adelante, se suma en esta edición de 2019 el cartel del Festival de Jazz… en tu zona. Las agrupaciones Swing for Five, Belle McNulty Quartet, Alicia Tamariz Quartet, Pareja Quartet y Fernanda Tasia Cuarteto podrán disfrutarse en diez distritos (todos salvo el Distrito Centro) entre el viernes 1 y el domingo 10 de noviembre, al aire libre y con acceso gratuito, gracias a una iniciativa del Área de Cultura y el Teatro Cervantes con el apoyo de las once juntas de Distrito y el patrocinio de Naturgy.
El trompetista Charles Tolliver abre el 33 Festival Internacional de Jazz el martes 5 de noviembre con un ‘set’ en el que reproduce su debut como líder, un espléndido álbum titulado Paper man (1968) que en su día grabó con Herbie Hancock al piano, Ron Carter al bajo, Joe Chambers a la batería y Gary Bartz al saxo y que tendía un puente entre el hard-bop y el ‘avant-garde’. Tolliver, también conocido por haber fundado junto al pianista Stanley Cowell el sello Strata-East Records, uno de los primeros creados por músicos, agotó el año pasadolas entradas del Blue Note neoyorkino en la recuperación de su icónico Paper man por su 50 aniversario. Ahora llega al Cervantes de Málaga para enseñarnos la riqueza del álbum junto al propio Gary Bartz, el pianista Keith Brown, el contrabajista Buster Williams y el batería Lenny White.
El saxofonista malagueño Ernesto Aurignac ya presentó en pasadas ediciones del Festival sus dos primeros discos, Uno y Annunakis. El miércoles 6 de noviembre vendrá con una gran agrupación formada por Pablo Valero (flauta), José Andrés Fernández Camacho (clarinete), Alejandro Revidiego (violín), Dani Anarte (trombón), Gon Navarro (guitarras), Néstor Pamblanco (vibráfono y marimba), Moisés P. Sánchez (piano), Joan Masana (contrabajo) y Juanma Nieto (batería), un Ernesto Aurignac Ensemble que presentará Plutón, un nuevo universo compositivo inspirado en los sonidos del cosmos, una especie de “viaje acústico interestelar” con influencias jazzísticas impresionistas y expresionistas a las que dota de una instrumentación única.
Kenny Barron recibirá el Premio Málagajazz, segundo que se otorga tras el entregado el año pasado al Billy Cobham, el tercer día del encuentro, jueves 7 de noviembre. Solista, acompañante, compositor, arreglista… Pocos músicos pueden presumir de la extraordinaria lucidez y la intuición natural para hallar fórmulas rítmicas inexploradas de Kenny Barron, uno de los instrumentistas mejor dotados técnicamente del jazz moderno, dueño de un fraseo elegante y exquisito, de una sutileza y elegancia de la que se han nutrido sus grabaciones como líder o como ‘side-man’ de grandes como los citados Lateef, Gillespie o Moody u otros de la altura de Chet Baker, Freddie Hubbard, o Stan Getz. En Málaga lo escucharemos en formato solista, es decir, en una ocasión idónea para apreciar mejor su elaborada técnica, su delicado lirismo y su deslumbrante imaginación como improvisador.
Charles Lloyd, flamante Premio ‘Cifu’ 2019, puede vanagloriarse de una carrera irreprochable en cuyos inicios como líder grabó extraordinarios discos como Love in (1966), Forest flower (67, un notable éxito comercial para un saxofonista post-bop independiente) o In the Soviet Union (70). Nacido en Memphis, comenzó tocando en los grupos de B.B. King y Bobby Blue Bland antes de fichar por Chico Hamilton, Gerald Wilson o el sexteto de Cannonball Adderley. En 1966 creó un cuarteto en el que concurrían Keith Jarrett o Jack DeJohnette, y ya en los ochenta, se unió a Michel Petrucciani, por citar algunas de sus alianzas. En sus discos todo encaja: destreza, sensibilidad, creatividad, pasión, espiritualidad y buen gusto. En Málaga lo acompañarán el viernes 8 Gerald Clayton al piano, Marvin Sewell a la guitarra, Harish Raghavan al contrabajo y Eric Harland en la batería.
El mexicano Antonio Sánchez vendrá a Málaga el sábado 9 acompañado de Migration. Chais Baird al saxo, John Escreet al piano, Orlando le Fleming al contrabajo y Thana Alexa a la voz conforman su banda de cabecera, con la que quiere crear conciencia sobre aquellos que como él tuvieron que abandonar su país. Sánchez es uno de los bateristas más diestros, interesantes y con una mayor capacidad de liderazgo de su generación,Pat Metheny se refiere a él como su “principal colaborador en los últimos años”, pero también es habitual en giras y discos de Chick Corea, Michael Brecker, Charlie Haden, Gary Burton, Toots Thielma
ns o Dianne Reeves. Su talento llegó al gran público cuando obtuvo el Grammy en 2016 a la Mejor Composición Instrumental por la banda sonora de Birdman, la cinta de Iñárritu. Desde entonces no para de abrir y explorar nuevos caminos en una carrera de muchos matices en la que equilibra complejidad y emoción, intelecto y alma, dificultades rítmicas y delicados matices melódicos.
La sesión del domingo 10 es otra con elevado contenido exploratorio y vanguardista, en este caso con el noruego Nils Petter Molvær, un trompetista capaz de mezclar el jazz con estilos más desafiantes –ambient, house, electrónica y breakbeat– con los que crear nuevos, intensos, hipnóticos y absorbentes paisajes sonoros. Petter Molvær comenzó a publicar en el influyente sello ECM, verdadera seña de identidad del jazz europeo más emocional, intimista y atmosférico, aunque su aclamado Khmer (ECM, 1997) era una vuelta de tuerca más al sonido vanguardista de la disquera alemana al fundir jazz con rock, electrónica y hip-hop. Tras la publicación allí de Solid ether (ECM, 2000), hubo que acuñar términos como ‘future jazz’, ‘electro jazz’ o ‘nu jazz’ para tratar de definir o catalogar sus creaciones, que nunca dejan de sorprender. En el Teatro Cervantes, tocará con el bajista Jo Berger Myhre y el batería Erland Dahlen.
El 33 Festival Internacional de Jazz de Málaga se despide el lunes 11 de noviembre con una de las perlas de la cantera española. La cantante y trompetista barcelonesa Andrea Motis acude al Teatro Cervantes con su quinteto y el repertorio de Emotional dance, debut en solitario editado en 2017 nada menos que por Impulse! Records. Un cuarteto de base formado por el bajista Joan Chamorro, el pianista Ignasi Terraza, el batería Esteve Pi y el guitarrista Josep Traver acompañará a Motis en la lectura de Emotional Dance, un disco en el cual la interpretación vocal se convierte en el protagonista escénico. Andrea Motis, una artista de solo 24 años, posee un encantador y versátil alto, con un sutil vibrato y un fraseo sucinto que le ha valido parangones con referencias estilísticas como Billie Holiday y Norah Jones.