Ante la noticia de la creación de un nuevo campo de golf en Mijas, (será el número 13), Ecologistas en Acción en rueda de prensa ha señalado que la Administración sigue apostando por un modelo insostenible obviando la situación de emergencia climática.
Para Juan Alarcón, coordinador de la asociación, la actuación ahonda en un modelo que esquilma los recursos naturales en beneficio de unos pocos. “Se escudan en el turismo de calidad y en la desestacionalización del turismo para reproducir el modelo insostenible del pasado. La administración no ha entendido que estamos ante una emergencia ambiental y climática”.
Y es que para la organización nuestros dirigentes olvidan que estamos en un territorio semi-desértico, con un aumento de población exagerado, y unos recursos hídricos en franca decadencia, “y solo se les ocurre a nuestros políticos aprobar un nuevo campo de golf con 350 viviendas turísticas, más otras tantas nuevas urbanizaciones”, afirma Juan Alarcón.
El portavoz de la organización ecologistas recordó que el campo lindará con una zona de especial conservación (ZEC), incluida en el catálogo de espacios naturales protegidos de Andalucía y en la Red Natura 2000, y dos ríos que albergan población de nutria, protegida en España.
El grupo ecologista defiende que antes de abrirle la puerta con el sello de “estratégico”, la Junta de Andalucía debería evaluar su impacto ambiental. Sin embargo, el Tribunal Supremo rechazó su recurso el pasado diciembre. La administración tampoco ha contestado a dos de sus ocho alegaciones.
La duda más acuciante es cómo se va a suministrar agua al campo de golf y a las 350 viviendas y hotel.
Cabe recordar que el proyecto Valle del Golf se sitúa sobre un acuífero, sobre el que actualmente ya existe una captación autorizada cercana para riego.
Ecologistas en Acción duda de que el nuevo campo se conforme con aguas depuradas, aunque así lo diga el proyecto. “En Mijas funcionan unas EDAR obsoletas: la del Cerro del Águila habría que ampliarla, y la de la Cala tiene un tratamiento no adaptado a estos tiempos. Esa agua no se va a echar a los campos de golf, que ya se resisten a usar la del terciario. Y menos ahora que todo el mundo pide agua regenerada”.