Por www.womanessentia.com
Lama al Suleiman y Rasha Hefzi, fueron elegidas el pasado 12 de diciembre junto a otras 15 mujeres en las últimas elecciones de Arabia Saudí. Aunque a muchos nos parezca imposible, han sido las terceras elecciones de la historia moderna de este país, y las primeras en las que las mujeres pudieron votar y presentarse como candidatas.
Este cambio fue posible gracias a un decreto del fallecido Rey Abdulá, quién además permitió que las mujeres puedan hospedarse en los hoteles sin una carta del cónyuge, nombró por primera vez a una mujer como viceministro y abrió la primera universidad mixta, entre varias mejoras.
Durante la pasada campaña electoral no pudieron presentar fotografías ni dirigirse a candidatos de distinto sexo sin la mediación de un portavoz, y aunque esta norma fuese para hombres y mujeres, para ellas fue considerada como discriminatoria ya que, al ser minoría, no tenían otra forma de hacer campaña que no fuese en privado.
Esta situación nos trae otra noticia estos días: la amenaza de muerte a las dos concejalas elegidas en la ciudad de Yedá por querer sentarse en la misma mesa que los hombres en las reuniones municipales del día 6 de enero. Debían quedarse detrás de un cristal opaco durante la duración de dicha reunión, así que su iniciativa llevó a Lama y Rasa a tener que aguantar las amenazas y críticas de sus compañeros.
Según el portal de noticias Arab News´, el director general de Asuntos de los Consejos Municipales, Judai al Qahtani, quién advirtió en diciembre que las mujeres nunca se sentarían cara a cara frente a los hombres, atribuyó estas amenazas a extremistas y defendió el derecho de las concejales electas a asistir a las reuniones, pero imagino que en su sitio, según se concluye de sus advertencias anteriores.
La incrustada idea en la mentalidad masculina de que la mujer es inferior y debe estar en otro plano, es la causa de estas amenazas ya que no hay ninguna ley que expresamente prohíba a las mujeres sentarse junto a los hombres en estas reuniones.
A pesar de la relativa apertura que intentó el Rey Abdulá durante el período final de su mandato, las limitaciones de las mujeres en este país como la prohibición de conducir, la obligación de llevar la hiyab ´o pañuelo en la cabeza, la imposibilidad de viajar sin haber pedido permiso previo a sus guardianes (padre, marido o hermano) siguen cuestionando el futuro.
El número de mujeres matriculadas en la universidad sobrepasaba al de hombres, habiéndose concedido 750.000 becas para estudiar en el extranjero durante la última década, siendo algunas de ellas destinadas a mujeres. Si bien hace unos días el Consejo de Ministros anunció la restricción de las condiciones para acceder a estas becas según comunica la agencia de noticias oficial SPA. Sin duda por la “mala influencia” que ejercían los estudiantes a su vuelta.
En el año 2013 Arabia Saudí lanzó su primera campaña contra la violencia machista con el lema “Hay algunas cosas que no pueden ocultarse” animando a denunciar el maltrato de las mujeres. Un gran avance en esa sociedad, pero cuestionable en su efectividad sin un cambio en la educación y en sus Leyes. Según investigaciones del Programa Nacional de Seguridad, la mayoría de las mujeres desconocen sus derechos y algunos hombres violan las enseñanzas religiosas y siguen costumbres y tradiciones aberrantes. Según este estudio, una de cada seis mujeres sufre a diario violencia verbal, física o emocional, y en el 90% de los casos los abusadores son maridos o padres, así que la situación de estar bajo su tutela legal hace imposible la denuncia de estos abusos, cometidos también sobre los menores, sobretodo niñas. Tuvo gran influencia en esta iniciativa el caso de la niña de 5 años muerta a manos de su padre, tras haber sido ingresada con signos de violación, cráneo roto y quemaduras, cuyo padre estaba en la cárcel no por imperativo judicial sino por la presión social. La ley Sharía no contempla que un padre sea condenado por la muerte de su hijo, según la cual su pérdida ya es suficiente castigo.
Queda mucho por hacer, la educación y el respeto a la dignidad humana es un reto para este país.
Acabo de leer la noticia de dos ejecuciones en el día de ayer por asesinato. En lo que va de año ascienden a 60 las personas ajusticiadas en este país…..