AUGC Cádiz quiere manifestar su apoyo y solidaridad a los guardias civiles y al agente de Vigilancia Aduanera que el pasado 27 de marzo sufrieron los insultos y el apedreamiento de un numeroso grupo de personas en una playa urbana de Sanlúcar, donde custodiaban sobre la arena una lancha neumática con más de una tonelada de hachís que había sido abandonada tras una persecución por el río Guadalquivir.
La situación se agravó hasta el punto de que los agentes, que habían solicitado la llegada de refuerzos, tuvieron que efectuar antes disparos al aire para intimidar a los acosadores, que en su actuación comenzaban a acercarse hasta la lancha.
Lamentablemente, no es la primera situación de este tipo que se produce en la zona en los últimos tiempos, con grave riesgo para la integridad física de los guardias civiles.
En este sentido, la falta de efectivos y la carencia de medios dificulta enormemente el trabajo en una zona ya de por sí muy complicada debido a las características del terreno donde se efectúan las persecuciones, en las que la coordinación del helicóptero que sigue a las lanchas neumáticas con las patrullas que acuden por tierra resulta harto difícil.
AUGC considera, por tanto, que la dotación de mayores medios materiales y humanos en la zona se impone como una necesidad perentoria, tanto para perseguir estos delitos como para salvaguardar la seguridad de los ciudadanos y de los propios guardias civiles.
Con más de 30.000 afiliados, AUGC es la decana de las asociaciones profesionales y la mayoritaria en el Consejo de la Guardia Civil. Cuenta con representación en todo el territorio español, en cada una de las unidades y especialidades del Cuerpo y viene liderando el movimiento asociativo desde la llegada de la democracia, cuando nació como un sindicato clandestino. Su lucha por la democratización y la desmilitarización de la institución le valió en 2010 el Premio Nacional de Derechos Humanos que concede la Asociación Pro Derechos Humanos de España (apdhe).