El Ayuntamiento de Benalmádena puso en marcha una campaña extraordinaria para el control de larvas de mosquito durante los meses de verano a través del área de Sanidad. La actuación se enmarca en un contrato municipal de emergencia gestionado por la empresa Contraplagas Ambiental tras la quiebra de la anterior adjudicataria.
La edil de Sanidad, Áurea Peralta, explicó que el objetivo es reforzar la aplicación de tratamientos larvicidas en imbornales y zonas de aguas estancadas como complemento a la campaña de primavera ya finalizada. La medida responde a la creciente presencia de mosquitos que pueden tener implicaciones para la salud pública.
El Ayuntamiento actúa de manera preventiva e intensiva en todo el término municipal para mantener las poblaciones de mosquitos en niveles aceptables sin recurrir a productos biocidas. Estos productos solo se utilizan en último recurso por su impacto sobre el ecosistema.
El contrato contempla dos campañas anuales en el viario público diferenciadas por núcleos urbanos: Benalmádena Pueblo, Arroyo de la Miel y Benalmádena Costa. Las actuaciones incluyen control de roedores, cucarachas y mosquitos, así como revisión de zonas sensibles y tratamiento de la procesionaria del pino en centros educativos e instalaciones municipales.
El contrato temporal hasta una nueva adjudicación definitiva supone una ampliación presupuestaria de 170.000 euros, un incremento del 160% respecto al anterior contrato. La inversión busca mejorar la eficacia del servicio y dar respuesta a nuevas plagas emergentes como avispas invasoras y diversas especies de mosquitos antes no presentes en el municipio.
La inversión responde al crecimiento poblacional de Benalmádena y a la necesidad de garantizar un entorno saludable para vecinos y visitantes durante los meses de mayor actividad turística. La ciudadanía puede comunicar incidencias relacionadas con plagas a través de los canales habituales de la administración local.
