Todos unidos bajo la misma reivindicación: que la Atención Primaria (AP) afronte una segunda reforma que aborde los problemas actuales por los que pasan pacientes y profesionales sanitarios.
El Colegio de Médicos de Málaga (Commálaga), junto con sindicatos y sociedades científicas, ha alzado la voz para poner sobre la mesa el Decálogo de Atención Primaria elaborado por el Foro Autonómico de Atención Primaria, que plantea los diez puntos necesarios para que la Primaria sea reconocida como lo que es, el eje del sistema sanitario.
El presidente del Commálaga, Dr. Juan José Sánchez Luque, afirmó que “ahora es el momento en Andalucía de arrancar el compromiso a la Consejería de Salud para que acometa la segunda reforma de Primaria que desde el Colegio de Médicos llevamos reclamando desde el año pasado”. El representante de AP del Commálaga, Dr. Ángel García Arjona, señaló que “parece mentira que el decálogo incluya que el tiempo mínimo del paciente sea de 10 minutos. Esta es una reivindicación que los médicos comenzamos hace más de una década y años después seguimos igual. No se ha avanzado nada”.
DECÁLOGO:
1. La Atención Primaria es el eje del sistema sanitario, y así debe ser reconocida a todos los efectos: incremento presupuestario, dotación adecuada de recursos humanos, aumento de la capacidad de realización de pruebas diagnósticas…
2. La Atención Primaria debe liderar, por tanto, la gestión de los procesos del enfermo crónico dentro del sistema sanitario y social, incluyendo la coordinación con el nivel hospitalario, centros geriátricos y de discapacitados, asociaciones de pacientes…
3. Médicos de familia y pediatras deben, a su vez, liderar la toma de decisiones relacionadas con la organización y gestión de los recursos sanitarios.
4. Dado su papel central en el sistema sanitario, los médicos de familia y pediatras deben tener acceso al catálogo completo de pruebas complementarias según indicación razonada y criterios de eficiencia clínica.
5. El ejercicio de la Medicina en Atención Primaria debe tener un entorno profesional y laboral atractivo: estabilidad, incentivación basada en criterios profesionales, reconocimiento de la penosidad (turnos de tarde, soledad…)
6. Las agendas deben adecuarse a una asistencia de calidad, con un tiempo mínimo de 10 minutos por paciente, siempre teniendo en cuenta el contexto socio demográfico y eliminando toda actividad burocrática que no tenga justificación clínica, facilitando al máximo su realización.
7. La gestión de la Incapacidad Temporal debe tener un diseño basado en criterios clínicos, evitando la multiplicación de informes que requiere la nueva regulación, y haciéndola extensiva a todos los niveles asistenciales.
8. La receta electrónica debe extenderse a todos los niveles asistenciales y a todo el Sistema Nacional de Salud, en un formato ágil y que garantice la interoperabilidad, así como el acceso al historial médico integrado a nivel nacional.
9. La formación en Atención Primaria debe empezar en la universidad, con la creación de un área de competencias en Medicina de Familia y la definición de competencias específicas de Pediatría de AP en la formación de pregrado, adecuando los criterios de acceso a la docencia universitaria a la realidad de la Atención Primaria.
10. Facilitar el acceso de los profesionales de AP a las actividades formativas y promover la investigación teniendo en cuenta las características propias de dicho nivel asistencial