Los datos difundidos hoy por el Servicio Andaluz de Empleo (SAE) referidos a las cifras de paro, reflejan un incremento del número de desempleados en Málaga, según la dinámica habitual del mes de agosto en nuestra provincia.
Según el SAE, actualmente se registran 146.321 parados en Málaga. Se produce así un aumento de 2.751 personas en relación al mes anterior.
Respecto a la comparativa interanual: la diferencia entre agosto de 2017 y el mismo periodo del año anterior es de 14.007 desempleados menos.
En el conjunto de Andalucía, también se incrementa el número de personas demandantes de empleo (17.094).
En esta misma dinámica, en el ámbito nacional, se contabilizan 46.400 personas más en situación de desempleo.
Por otra parte, en el mes de agosto se firmaron en la provincia un total de 57.253 contratos, de los que 3.187 fueron indefinidos.
En este mismo periodo, la afiliación a la Seguridad Social disminuyó en Málaga en 1.459 personas, registrándose un total de 598.753 cotizantes.
En términos interanuales, sin embargo, la provincia tiene ahora 30.391 afiliados más que en agosto de 2016.
Como se ha indicado, los datos reflejan el comportamiento habitual del mes de agosto, en el que tradicionalmente se produce un incremento de las cifras de paro, explicado por la finalización de cierto número de contrataciones estivales en el sector Servicios, principalmente.
Se da la casuística de que, en los últimos cinco ejercicios, esta tendencia no venía produciéndose, por lo que las cifras analizadas retoman la dinámica de ejercicios anteriores. Sin embargo, merece destacarse una vez más la perspectiva interanual, que constata la evolución favorable en los datos de paro en la provincia desde una escala más amplia.
A la vista de los datos, debe recordarse que nuestro reto más urgente sigue siendo la creación de puestos de trabajo, como fórmula de crecimiento y desarrollo.
Resulta imprescindible también, en este sentido, garantizar que las actividades productivas se sostengan en el tiempo y no se asocien a elementos estacionales, muy especialmente para el sector Servicios, principal pilar del empleo en Málaga.
Para ello, se deben priorizar aquellas medidas que supongan la generación de empleo, impulsando sectores estratégicos y dotando a nuestras empresas y autónomos de las herramientas necesarias para crecer, diversificarse e innovar.
Por último, en orden a conseguir los objetivos anteriores, es fundamental que se propicie el estímulo de la actividad empresarial y el flujo crediticio, las inversiones productivas y las políticas activas de empleo, entre otras medidas.