Datada en el siglo XVIII, la fuente de piedra de la plaza del Obispo vuelve a lucir tras ser restaurada por parte del Área de Cultura. El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, junto a las concejalas de Cultura, Noelia Losada, y Sostenibilidad Medio Ambiental, Gemma del Corral, respectivamente, ha visitado esta mañana esta fuente, de cuya restauración se ha encargado la empresa antequerana Chapitel Conservación y Restauración. El trabajo. Que se ha realizado in situ, forma parte de un contrato que incluye también la restauración integral de la Fuente de las Tres Gracias, en la Plaza del General Torrijos, y la escultura El Árbol de la Amistad de los Jardines de Picasso, siendo el montante total de los trabajos de 40.9000 euros. Por su parte, Emasa se ha encargado de la renovación del sistema hidráulico.
LA RESTAURACIÓN
La fuente es de mármol veteado de gris, idéntico al de la hornacina central del Palacio Episcopal. Se encontraba totalmente cubierto por concreciones calcáreas, y la fuente había sufrido además varias intervenciones inadecuadas.
Para garantizar su conservación era preciso retirar los morteros inapropiados, sustituir algunas piezas rotas del mármol del borde de la taza y eliminar la pintura azul de su vaso. Debido a una inclinación que tenía, se le habían anulado los caños originales, lo que provocaba que el agua resbalara por el cuerpo de la fuente propiciando un aporte mayor de depósitos calcáreos, que son incompatibles con su optima conservación y preservación para el futuro, por lo que se la ha dotado de nuevo de los caños, realizados a imagen de los originales.
El tratamiento que se ha efectuado ha sido eliminación de depósitos calcáreos, morteros, cementos inadecuados, pintura y depósitos biológicos, limpieza en profundidad de todo el material pétreo para poder ver en profundidad los daños que pudiera tener, tratamiento biocida, reconstrucción con piedra natural igual a la original de las grandes faltas (que estaban rellenas de mortero de cemento), reposición de los equipos hidráulicos, sellado de todas las juntas, impermeabilización interior del vaso de la fuente, eliminación de los tapones de piedra que tenían los caños y reposición de los caños de bronce para lograr su imagen original. Por último se ha arreglado con nuevas piezas de piedra de las que estaban rotas en lo que hace de pedestal de la fuente.
Respecto al “mar” o fondo de la fuente, se ha eliminado el color azul de la protección que tenía para evitar fugas, y se ha sellado con mortero especial impermeable.
Además, aprovechando la restauración de todos los elementos históricos, se ha renovado completamente el sistema hidráulico, de aporte y vaciado de agua. Estas labores las ha realizado Emasa. Así mismo se han renovado las piezas rotas de lo que hoy forma una especie de pedestal o base para la fuente, que se diseñó cuando se remodelo la plaza, eliminado la verja y el jardincillo que la rodeaba, y se pavimentó de nuevo.
LA HISTORIA DE LA FUENTE
A mediados del siglo XVIII y cuando finalizaron las obras del Palacio Episcopal se instaló esta fuente de piedra en la que ya se conocía como Plaza del Obispo. Existen noticias escritas sobre ella desde 1761. En 1786 se dotó de Agua del Acueducto de San Telmo para facilitar el abastecimiento del Centro.