A dos meses de que Portugal acoja la próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos en Lisboa —del 27 de junio al 1 de julio— los eurodiputados ibéricos del Parlamento Europeo tienen una gran oportunidad de mostrar al mundo su ambición por proteger las aguas de la UE.
Durante la primera semana de mayo, eurodiputadas y eurodiputados en Estrasburgo podrán garantizar que las llamadas Áreas Marinas Protegidas (AMP) estén realmente protegidas, mediante la prohibición de métodos de pesca destructivos como la pesca de arrastre de fondo dentro. Es en Estrasburgo donde se votará la aprobación del informe de iniciativa ‘Hacia una economía azul sostenible en la UE’, presentado por la eurodiputada socialista portuguesa Isabel Carvalhais.
Para Ecologistas en Acción y las organizaciones europeas BLOOM y Oceana, dicho informe es una oportunidad única para garantizar que las AMP no sean simples líneas de puntos en un mapa (los llamados paper-parks). La votación de un informe de iniciativa no es jurídicamente vinculante, pero es un precursor importante para conseguir la prohibición de actividades destructivas en estas áreas y enviar un mensaje político firme para actuar en estos tiempos de crisis climática y de pérdida de biodiversidad sin precedentes.
Justo cuando el último informe del IPCC pide a los responsables políticos que tomen medidas inmediatas y estructurales para limitar el calentamiento global a 1,5 ºC,las organizaciones ambientales y sociales exigen que se pase de las palabras a los hechos: “En la actualidad la gran mayoría de las Áreas Marinas Protegidas no lo están en absoluto. De hecho, se permite la extracción de recursos o la pesca con artes de arrastre que producen la abrasión del fondo marino, como la pesca de arrastre de fondo o el cerco demersal”, declaran.
Ecologistas en Acción, BLOOM y Oceana destacan algunos datos de la situación de las AMP:
— Según un estudio de Oceana, actualmente el 86 % de las aguas europeas protegidas son objeto de una pesca intensiva con artes que dañan el fondo.
— El estudio científico ha llegado a demostrar que en más de dos tercios de las AMP del norte de Europa, la pesca de arrastre era 1,4 veces más intensa dentro de la zona denominada protegida que fuera de ella
— La Comisión Europea advierte que menos del 1 % de las zonas marinas de la UE están estrictamente protegidas en la Unión Europea
— El Tribunal de Cuentas Europeo señaló en 2020 que la forma en que se había aplicado la red de áreas marinas protegidas de la UE en los últimos 20 años no proporcionaba una protección real del medio ambiente marino.
Por ello, las organizaciones insisten en que proteger el océano de actividades de alto impacto —como la pesca de arrastre de fondo— es una forma eficaz de combatir el cambio climático. Tal y como ha evidenciado el IPBES, “se calcula que, a nivel mundial, la alteración del carbono de los sedimentos marinos previamente inalterados mediante la pesca de arrastre libera el equivalente a entre el 15 % y el 20 % del CO2 atmosférico absorbido anualmente por el océano».
El océano, aliado contra el cambio climático
Para Ecologistas en Acción, BLOOM y Oceana, el océano es un aliado esencial en la lucha contra el cambio climático. Las AMP, cuando se protegen eficazmente, son una buena herramienta para restaurar los ecosistemas marinos y preservar la biodiversidad. La biomasa de peces en las reservas marinas es, de media, un 670 % mayor que en las aguas circundantes no protegidas.
Sin embargo, tal y como afirman las organizaciones ecologistas, el océano tiene que estar sano para proporcionar estos servicios ecosistémicos esenciales. “El océano no tiene ninguna posibilidad de recuperarse si está sometido a la presión constante de las actividades pesqueras industriales. Ha llegado el momento de que el Parlamento intensifique su ambición para frenar décadas de sobrepesca masiva, destrucción de hábitats y políticas deficientes de conservación de la naturaleza. El clima, la biodiversidad marina y la humanidad no pueden esperar. ”, declaran.
La aprobación del informe puede tener luz verde si los diputados españoles y portugueses votan a favor. “Dado que se han comprometido en el periodo previo a las elecciones europeas a aplicar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU y a luchar contra el cambio climático, ahora tienen la oportunidad con esta votación de cumplir sus promesas. Estas personas tienen la oportunidad de votar para defender el clima, la biodiversidad y los intereses de la ciudadanía en lugar de los lobbies de la pesca industrial”, concluyen las organizaciones ambientales.