Por la redacción de www.oceaund.com
Más que una vuelta se podría escribir aquel estribillo poco acertado de “nunca se habían ido…” pero la realidad es que sí, Os Resentidos se fueron pero algo ha quedado. Con este pequeño regreso que nadie sabe si se alargará en el tiempo lo que si han conseguido es hacernos recordar algunos de esos buenos momentos del punk-folk gallego que tanto hemos echado de menos.
Ser consecuentes con un discurso, ser lo suficientemente irónicos en sus letras como para que permanezcan actuales pasados treinta años es algo de lo que pocos se pueden sentir orgullosos.
Lo tengo que reconocer, siempre se me han movido los pies a medio ritmo entre el pogo y el salto energético-encolerizado al escuchar ese ‘Galicia canibal’. Hay muchas canciones que nos sitúan geográficamente o nos indican la autopista para conocer un pueblo, pero sin duda el Google Maps de la música gallega pasa obligatoriamente por Os Resentidos.
Anton Reixa es uno de esos personajes de la escena musical que siempre ha sorprendido, bien por su actitud bien por su compromiso con la sociedad (recordar su fugaz paso por la SGAE). Ahora los mensajes e ironías que siempre impregnaron sus textos en los 80 resurgen y aprueban el examen del tiempo adentrándonos en el pensamiento cíclico de la sociedad y por ende de nuestras propias vidas.
26 trozos de la mejor música gallega recopilados en un directo en el que harán preguntarte quiénes fueron si no los conocías y o te harán sentir un poco más joven si ya pasas los 50. La inclusión de todo tipo de ritmos en sus temas hicieron siempre de Os Resentidos un grupo algo revolucionario, adelantado a su tiempo y por supuesto reivindicativo. Muchas han sido las bandas que posteriormente han entendido la música como la mezcolanza necesaria donde todo tiene su sitio pero sin perder las raíces de cada uno. Os Resentidos lo consiguieron y ahora, a pesar de que pocas veces hace un sol del carallo en Galicia, nos obligan a volver a afinar los oídos y fijarlos en el oeste patrio. Letras y sonidos corriendo por las neuronas consiguiendo un cocktail ideal entre el ritmo y el mensaje comprometido. Todo para volvernos nostálgicos. A los más jóvenes sólo podemos recomendarles que lean mientras escuchan porque ya en los 80 alguien hablaba sobre el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional, los parados, la lucha sindical, el guiño republicano, o sobre los anti-sistema.
El disco, grabado el pasado mes de marzo en Ourense, contó con una big band, la histórica Banda Municipal de Ribadavia, además de contar con la colaboración de Roberto Sobrado, SES y Sito Sedes.
Sí, todavía sigo recordando el ‘Galicia sitio distinto’.